La Maldad de los Hombre IV
(La Misericordia de Dios)
Jonás 3:4-10
4 Y comenzó Jonás a
entrar por la ciudad, camino de un día, y predicaba diciendo: De aquí a
cuarenta días Nínive será destruida. 5
Y los hombres de Nínive creyeron a Dios, y proclamaron ayuno, y se vistieron de
cilicio desde el mayor hasta el menor de ellos. 6 Y llegó la noticia hasta el rey de Nínive, y se levantó de su
silla, se despojó de su vestido, y se cubrió de cilicio y se sentó sobre
ceniza. 7 E hizo proclamar y
anunciar en Nínive, por mandato del rey y de sus grandes, diciendo: Hombres y
animales, bueyes y ovejas, no gusten cosa alguna; no se les dé alimento, ni
beban agua; 8 sino cúbranse de
cilicio hombres y animales, y clamen a Dios fuertemente; y conviértase cada uno
de su mal camino, de la rapiña que hay en sus manos. 9 ¿Quién sabe si se volverá y se arrepentirá Dios, y se apartará
del ardor de su ira, y no pereceremos? 10
Y vio Dios lo que hicieron, que se convirtieron de su mal camino; y se
arrepintió del mal que había dicho que les haría, y no lo hizo.
Introducción
El mundo ha sido privilegiado
porque quien lo rige, lo hace con justo juicio. Es común ver en los días de hoy,
como la injusticia suele ser una cualidad de los hombres que por su beneficio personal
favorecen a sus propios intereses y no a la verdad. Esto es el caso de Dios.
Hemos hablado en estos últimos
días sobre el juicio de Dios y la condenación que han sufrido aquellos que han
sido hallados culpables de muerte por rebelarse contra Dios. Sin embargo hoy no
quiero hablar de la condenación de un pueblo rebelde, si no de la misericordia
y el perdón de Dios ante una nación que escucho la voz de alerta y se
arrepintió de su mal camino.
I.
LA VOZ DE ALERTA
Dios no castigara al justo con el impío. Una verdad bíblica es que cada uno recibirá lo
que sus hechos demandaron y cosecharan lo mismo que han sembrado.
Lo único que puede su destino ante el juicio
de Dios es el arrepentimiento.
Dios siempre da una voz de
alerta antes de traer su juicio sobre las naciones, antiguamente utilizo los profetas como
intermediario para que la gente se volviera a Dios. Hoy sigue utilizando a la
iglesia para que este mundo escuche la voz de alerta y se vuelvan al Señor.
Jonás 1:1-2
inicia con el llamado de Dios a su profeta para que anunciara lo su juicio. Vino palabra de
Jehová a Jonás diciendo: 2 Levántate y ve a
Nínive, aquella gran ciudad, y pregona contra ella; porque ha subido su maldad
delante de mí.
Dios pudo haberlos destruidos
inmediatamente, sin embargo le dio un ultimátum para que se volvieran a él y
retrasar el castigo.
Dios le dijo a Jonás; porque ha subido su
maldad delante de mí. Estas palabras están muy familiarizadas con
hechos que trajeron la ira de Dios sobre la humanidad.
Nínive era la ciudad más grande el reino de Asiria, este país era una potencia mundial en los tiempos de los
profetas. Se menciona en la Biblia como enemiga y conquistadora del reino del
norte de Israel. En Nahúm 3:1 se describe esta ciudad
como sanguinaria, fornicaria, como una ciudad dada a la hechicería y a la
idolatría. Ay de ti, ciudad sanguinaria, toda llena de
mentira y de rapiña,
El libro de Jonás no dice mucho
sobre la condición de maldad de Nínive pero el profeta Nahúm habla
detenidamente de la perversidad que tenía esta gente y porque su maldad había
colmado la paciencia de Dios. El profeta
Nahúm declaro que Dios traería su
juicio sobre ellos. 3:4 a causa de la
multitud de las fornicaciones de la ramera de hermosa gracia, maestra en
hechizos, que seduce a las naciones con sus fornicaciones, y a los pueblos con
sus hechizos.
Por esta razón Dios envió al
profeta a decirle que iba a destruir la ciudad por qué no toleraría más su
corrupción y perversidad. Yo Quiero decirte en este momento mi querido hermano
que Dios sigue enviando profeta a las
naciones, Dios
sigue hablando a la vida del pecador, Dios
sigue dando una voz de alerta. Aleluya
Nínive era una ciudad poderosa
y perversa por eso vemos a Jonás aterrado de no querer ir allí, note que Jonás tenía más miedo de los
Ninivitas que de Dios. Esta gente era tan perversa que Jonás no
quiere que ellos reciban la misericordia de Dios, más bien sus deseo es que el
castigo sea tan severo que toda esta raza desaparezca de la tierra.
II.
EL ARREPENTIMIENTO
El arrepentimiento calma la ira
de Dios. 2 crónica 7:4 si se humillare mi
pueblo, sobre el cual mi nombre es invocado, y oraren, y buscaren mi rostro, y
se convirtieren de sus malos caminos; entonces yo oiré desde los cielos, y
perdonaré sus pecados, y sanaré su tierra.
La justicia de Dios consiste en perdonar el castigo de
aquellos que se arrepienten genuinamente, aquellos pueblos que no se arrepintieron sufrieron el
castigo proporcionar a sus hechos. Pero
el que se arrepiente dice la palabra que El Señor es fiel y justo para
perdonar.
Jonás entro a esta ciudad
malvada no a decirle a la gente que se arrepientan, si no a decir lo que Dios mando.
¿Qué mando Dios a decir? De aquí a cuarenta
días Nínive será destruida
Nínive era una ciudad bastante
grande, dicen los eruditos que sus muros eran de 13 km de circunferencia, y su distrito era de 50 a 100 km de diámetro a la que había que dedicarle 3 días de camino para recorrerla, sin embargo Jonás
camino un día y predico diciendo lo que Dios mando.
Jonás 3: 5 Y los hombres de Nínive creyeron a Dios, y
proclamaron ayuno, y se vistieron de cilicio desde el mayor hasta el menor de
ellos.
Nínive se convirtió totalmente
al escuchar el juicio que les venía. Yo no sé cuantas veces has sentido la
advertencia de Dios para ti, pero quiero decirte que él no contenderá
para siempre con el hombre, El seguirá advirtiendo toda la vida, es
necesario que como Nínive te arrepientas de tus malos camino para detener la
ira de Dios sobre tu vida.
Hebreos 4:12 Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más
cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta partir el alma y el
espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las
intenciones del corazón-.
Es el momento de ser audible a la palabra, yo se que Dios está hablando a tu vida, yo se que esta
palabra viva ha quebrantando tus deseos de incurrir al mal, es por
eso que Dios te dice que te vuelvas a él, aleluya,
que camines siguiendo sus pasos y que seas ejemplo para este mundo que va en
decadencia.
El rey de Nínive ordeno a todo el pueblo hacer
ayuno y oración. Jonás 3:8 cúbranse de cilicio
hombres y animales, y clamen a Dios fuertemente; y conviértase cada uno de su
mal camino, de la rapiña que hay en sus manos. 9 ¿Quién
sabe si se volverá y se arrepentirá Dios, y se apartará del ardor de su ira, y
no pereceremos?
Hay que entender que esta gente eran idolatras, una ciudad pagana que incurría en toda clase de prácticas pecaminosa,
sin embargo escucharon la voz de alerta, se humillaron al señor y se apartaron de su mal camino.
3:10 Y vio Dios lo que hicieron, que se convirtieron
de su mal camino; y se arrepintió del mal que había dicho que les haría, y no
lo hizo
Conclusión
Si bien sabemos que Dios
castiga al pecado y trae su ira sobre aquellos que se revelan en su contra, también debemos saber que el ama y perdona a los que se
arrepienten.
El sacrificio de la cruz nos
dio una nueva oportunidad. Así que Dios te dice hoy YO QUIERO
PERDONARTE, EN LUGAR DE CASTIGARTE, YO
QUIEROMOSTRARTE MI AMOR Y NO MI IRA. Así que la oportunidad de salvación
es hoy, el momento de volverse a Dios es ahora, de la misma manera que Dios detuvo el castigo para Nínive, así lo hará contigo y con esta nación, si de
todo corazón se humilla y le busca en Espíritu y en Verdad.
Dios te bendiga y Dios te guarde….
Alfredo Valdez Montero
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